martes, diciembre 19, 2006

Los martes: CINECLUB - 29 - Adaptation (el ladrón de orquídeas)


Adaptation - 2002 - Director: Spike Jonze

Reparto:
· Nicolas Cage (Charlie Kaufman / Donald Kaufman)
· Meryl Streep (Susan Orlean)
· Chris Cooper (John Laroche)
· Tilda Swinton

Guión: Charlie Kaufman (inspirado por el libro de Susan Orlean)
Música: Carter Burwell

Tengo que dar un giro a mi vida. Charlie Kaufman, guionista de "Cómo ser John Malkovich" se encuentra ante el encargo de adaptar un libro para el cine. Suda, tiembla, como cada vez que se enfrenta a sí mismo, autofágico, dubitativo. No quiero que vaya de sexo, ni de tiros, ni de persecuciones de coches, ni de personajes que aprendan grandes lecciones de la vida o que lleguen a quererse uno a otro, o a superar obstáculos y que triunfen al final. No sé, el libro no es así, y la vida tampoco.

Si quieren encontrarse de lleno con la paradoja del genio creador, asómense a esta película... no, mejor olvidemos este camino narrativo por obvio. Hablemos de la orquídea fantasma y de Laroche. A Laroche le apasionaban las orquídeas, pero llegué a la conclusión de que le apasionaba la dificultad para conseguirlas tanto como las propias orquídeas, relata el libro de Susan Orlean, periodista del New Yorker. Continúa más tarde: , quiero saber lo que se experimenta al sentir tanta pasión por algo. Sí, quizás sea eso, no es una película sobre un guionista, su hermano gemelo, una escritora, un furtivo, sólo es una película sobre la pasión.

Pero no, no, la película no es así. La película trata sobre debilidades: la neurosis de Charlie, la simpleza de Donald, el cinismo de Susan, los delirios de Laroche... o quizás se ocupa de cómo intentan encontrar su lugar en el mundo. ¿Quizás? ¿esa es la única conclusión, un "quizás"? ¿pero quién escribe aquí? ¿me he vuelto un pusilánime o resulta que no entiendo nada? Aunque tendría que estar todo clarísimo, Charlie es nada menos que el guionista de la película, y Susan la autora del libro en el que se basa la misma. Y la orquídea... es una simple flor. Evolución, adaptación, el cine como un lenguaje que se retroalimenta y, a veces, se devora a sí mismo.
Menos mal que todavía me queda el final.

Importa el conflicto, la decepción, pero más cómo nos adaptamos al conflicto, cómo evolucionamos tras la decepción, hasta encontrar eso que nos falta. La droga de la fascinación, qué obvio de nuevo, eso es lo que esconde la orquídea fantasma. Las grandes frases están allí para que las cojas: Uno es lo que ama, no lo que le ama. Está en nosotros adaptarnos y acabar como termina cualquier héroe que se preste (un Bruce Willis al uso), apoyado en el coche de policía, entre sirenas, con una manta sobre los hombros, frente a una humeante taza de café.
Ya tenemos el final de siempre, la moralina de siempre... como realmente nos gusta.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Gran película. Todo un mérito saberle escribir la reseña

HombreRevenido dijo...

Realmente es una película complicada de explicar, Laurel. Tanto que ni yo lo he conseguido, y eso que estuve pensando dos o tres minutos sin parar.

Anónimo dijo...

supongo que en tu empresa saben que has perdido dos o tres minutos sin trabajar, no?

HombreRevenido dijo...

Laurel, en mi empresa no se entera nadie de nada. Menos mal.