Podría sacar muchos posts inspirados en su entrada. Pero voy a desarrollar el peor posible, porque es el que ha salido primero por la válvula de la olla express y hay que respetar escrupulosamente los turnos.
En uno de los recovecos del post, se habla sobre los planes de dopaje olímpico de los rusos y yo me he acordado de una estadística que salió hace un tiempo, cuando hubo la movida previa a los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro.
Si recordáis el caso, muchos deportistas de Rusia fueron excluidos.
Entre el atletismo y el ciclismo (los clásicos del endrogamiento competitivo) se cuelan la halterofilia (must), la lucha, el piragüismo y los paralímpicos (¡los paralímpicos!)
Pero, como ya me conocéis, la enjundia hay que buscarla más abajo. Veamos:
* 8 positivos en Bobsleigh.
Para el que no lo sepa, el bosleigh es tirarse 4 colegas con un trineo grande por una rampa como auténticos locos. ¿Hace falta doparse para eso? (fuera de las inevitables 2 botellas de vodka)
Al menos el número es un múltiplo de 4, no se dejaron a uno de ellos, mosqueado, porque se dopaban y no le decían nada.
* 4 positivos en Esgrima
Por lo visto para la espada también hace falta mandanga. Quizás alguna anfetamina para estar bien atento. Yo qué sé.
* 1 positivo en Tenis de mesa
Esto es el colmo. Es drogarse por drogarse.
Y lo que me parece de traca:
* 2 positivos en Curling.
Ya sabéis lo que es el noble arte del curling ¿no?
Tirar la piedra y darle a la escoba.
A veces tiene sus peligros, eso sí.
Ahora tengo la tentación de transformar el post en una colección de gifs tronchantes de curling, pero volvamos al tema que nos ocupa, que es muy serio.
2 jugadores/as de curling en el programa de dopaje nacional de Rusia.
Me quedo paralizado ante las posibilidades del caso.
Me da tanta risa que sólo puedo mantener el rictus serio y aguantar.
Da para una película cómica de altísimo nivel.
Si no la hace nadie la escribiré yo.