¿Porque os quiero? Bueno, no exactamente. La mayoría sois gentuza y os he cogido un poco de cariño con el roce pero es un afecto residual, casi síndrome de Estocolmo, poco más. En fin, que os soporto y ya vamos bien.
¿Porque es viernes? A lo mejor algo de eso hay, no seré yo quien lo descarte categóricamente. La cercanía del fin de semana tira de todos nosotros hacia arriba. Pero tampoco es eso.
¿Porque me he consagrado al blog como un benedictino a su biblioteca?
Ya claro. Pero si estoy todo el día en el tuiter haciendo el chorras... ¡qué voy a consagrarme yo! Si yo soy un vivalavirgen que no tiene sustancia ni la conoce.
¿Pues por qué es entonces?
Ay, amiguitos, me conmueve esa dependencia que habéis desarrollado hacia mí, buscando respuestas como el orangután urbano busca cobertura cuando sale al campo.
La única razón que justifica este post es la cafeína.
Me lo da todo y no me pide nada a cambio.
La cafeína es el fuego de Prometeo cotidiano.
Vivo por ella, como decía esa canción que cantaba Andrea Bocelli con Marta Sánchez, ¿os acordáis?.
"Vivo por ella que me da fuerza, valor y realidad para sentirme un poco vivo..." qué acierto. Si Andrea Bocelli pudiera verme ahora mismo se sentiría orgulloso... Verme... A ver, lo digo en sentido figurado. Verme no, porque es ciego. Aunque imaginaos que pudiera verme de verdad. Un milagro. No digo que pueda, pero imaginaos que la cafeína pudiera lograrlo. Si alguien puede lograrlo es ella.
A ver, Marta Sánchez, no me mires así. Estoy escribiéndole a mis lectores del blog. No es tan raro. La mayoría son gentuza, pero por las mañanas me tomo mi ración de cafeína y les veo, no sé... les veo mejores personas.
¿Cómo? Sí sí, ya te puedes ir.
Tampoco hay que ponerse desagradable. Tú cuando Olé Olé molabas.
15 comentarios:
Yo también te he cogido cariño... y llevo mi dosis de cafeina mañanera tomada
jajajajajajajajajajaja....jajajajajajaja...Le he lído tu post en alto a Monikova y cuando hemos llegado a lo de Andrea Bocelli casi nos ahogamos de la risa...
tu cafeina en vena me provoca lagrimones de risa...
hemos desarrollado dependencia a ti como nuestros tomates y cebollas a la NICER DIZZER!!
Bravo, Dina, si al final la cafeína va a conseguir su propósito original: la fraternidad universal.
Molinos, esas risas son señal de salud. ¡¡Vais a vivir 100 años!!
Anónimo/a, jaja. Me queréis como a un hermano ¿verdad?. Como Caín a Abel.
Muy divertido! La cafeína como nueva diosa y musa del hombre contemporáneo...
Hasta 30 tazas de café por jornada se tomaba Balzac, porque sus novelas son chulas de leer, pero un coñazo escribirlas.
Niño desgraciaíto, amén.
Sin ella... el bostezo.
Nán, no es mal ratio. Con 30 tazas de café al día creo que me daría tiempo a escribir una novela en 1 semana. Y luego morir, como una mariposa efímera.
"tú cuando Olé Olé molabas"
jajajaja!!! No tengo parole...
Tú no te has chutado cafeina, te has chutado otra cosa... reconócelo jajaja
No me gusta el café, pero nada, nada (aunque este año ya me he tomado uno con leche y un descafeinado de sobre también con leche). A lo que iba, no me gusta el café, pero si la cafeína provoca ese amor hacia los demás... no sé, igual debería empezar a tomarlo de manera regular...
Cada vez que nos dejan un ratito de internet en el trullo entramos 5 minutos al Interviú y el resto nos venimos aqui.Cuando salga con la condicional veremos si repites lo de gentuza.
Por cierto , entre en el trullo por cargarme a los que hacían el café de mi oficina. Fue en defensa propia, o ellos o yo, pero el juez no lo entendió, y dijo que había alevosía.....
Alevosía hay en el café de mi oficina
Me lo vas a decir a mi que tomo 4 al dia. El mundo tiene otro color.
Ya decia yo que algo te chutabas!!! ahora lo veo todo mas claro!!! ;)
Anónima sin más, es la pura verdad.
Speedygirl, la mezcla entre euforia pre-finde y el carajillo de redbull genera estas cosas.
Nisi, la cafeína es la paz mundial (con nervios).
Hay otras fórmulas de ingerirla. La cocacola, por ejemplo. La chispa de la vida. ¡A mí me funciona!
Peter, "gentuza" desde el cariño. Gentucilla, más bien.
Entiendo que sería un café malo. A lo mejor en vez de alevosía era achicoria.
Aquello noerayo, es justo y necesario. La adicción de tantos simios buenos.
Verillo, ese es mi vicio. Ya lo sabéis todos.
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