Escuchando a Arrabal me acordé de Duchamp. El hombre que se preguntaba: "¿se pueden hacer obras que no sean de arte?". Otro de esos tipos fluorescentes que cambiaron el mundo.
Y de allí al manifiesto dadá:
A priori, es decir, con los ojos cerrados, Dadá sitúa antes la acción y por encima de todo: a la Duda.
DADÁ duda de todo. Dadá es un tatú. Todo es Dadá. Desconfíen de Dadá.
El anti-dadaísmo es una enfermedad: cleptomanía propia, el estado normal del hombre es DADÁ.
Pero los verdaderos dadás están contra DADÁ.
Tristán Tzara (1896-1963)
Y eso que aquí, en su momento, también tuvimos un solemne manifiesto (Yo mono) de la misma cuerda.
Me encanta eso de la cleptomanía propia.
Es una definición extraordinaria del proceso creativo y de lo contrario. Y no sigo que luego tengo pesadillas.
También llega lejos Duchamp, dotando al objeto de una única vía artística: la visión subjetiva.
Durante la segunda década del siglo XX coincidieron en Zurich cinco hombres: Tristan Tzara, James Joyce, Albert Einstein, Vladímir Ilich Uliánov (Lenin) y Carl Jung.
Se trata de cinco de las mentes más brillantes del orbe, expuestas a los mismos estímulos, paseando por las mismas calles, en el mismo clima de lluviosa neutralidad (previo y contemporáneo a la Primera Guerra Mundial).
Cinco hombres que revolucionaron: el arte, la ciencia y la literatura, la psicología y la política.
Hay una leyenda, que yo no me acabo de creer, que afirma que un día se juntaron los cinco en el Cabaret Voltaire, y decidieron que había llegado el momento de cambiarlo todo (para bien o para mal). Más o menos lo que decimos todos alguna vez en la barra de un bar. Con la diferencia de que ellos lo cumplieron.
Yo creo, sin embargo, que fue sólo azar. Interpretaron, cada uno a su manera, algún triste atardecer de la ciudad.
Pero siempre nos quedará la duda.
Ya sabéis: todo es dadá.
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10 comentarios:
Queda bonito el "meador" asi al reves y expuesto... igual me pongo uno en el salón de casa.
Intenta poner uno que no sea exactamente este, Carburo. El original de Duchamp te costaría muchos muchos millones de euros.
Super curiosa la entrada!!!
Me ha gustado, aunque llevo un poco mal la filosofia. Es de esas cosas que te gustan pero que no entiendes bien a la primera... ni a la segunda ni a la tercera ni a la...
Realmente curioso eso de los 5 genios en Zurich. Un dia saco el De Lorean del garaje y lo comprobamos!
Buen fin de semana!!
du du du..da da da... is all I want to say to you...
Esto no lo entiende nadie, Lasa, no te creas que yo lo comprendo demasiado.
Ese viaje en el tiempo sería muy interesante. Habría que ver en qué idioma nos entendíamos con un rumano, un irlandés, un alemán, un ruso y un suizo. Imagino que en el idioma universal de los gestos. O a gritos.
Pequeña Silvi, tú eres un poco dadaísta ¿no crees?
Creo necesario ponerle banda sonora a tu post, Hombre Reve.
http://www.youtube.com/watch?v=BMikAeK8rL0
No es cosa fácil enfrentarse a un ready-made de Duchamp. Te obliga a hacer un ejercicio de desapego y desprendimiento del gusto adquirido y del placer que éste proporciona, para sumergirte en un vacío e indescifrable código que impregna la obra. No hay juicio posible, no hay entendimiento, un objeto con útil pasado es creativamente transformado en algo próximo a la nada y nos observa. Dadá lo envuelve. La duda nos envuelve.
(¡Coño, hay que ver este priorato como despeja la mente!, o no)
(muy bueno el manifiesto “Yo mono”)
Ana, estoy estupefacto.
Se me ha pegado la melodía, creo que moriré con ella en los labios. Y el resto del vídeo, qué decir, es da da da...
Gracias por lo del manifiesto, Pobre pero honrado. No tuvo demasiado calado en su momento, pero claro, entonces estabais en primaria.
Los objetos como preguntas. Me parece una perfecta forma de arte (y antiarte), dadá contra dadá.
Dadaísta?...no sé, pregúntaselo a The Police
http://es.youtube.com/watch?v=yKtSV45cVtQ&feature=related
Los Police, dadaístas también.
Muy buena, Little Silvi, duduá.
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