"París, años 30. Joyce le dicta a Beckett su work in progress, que será "Finnegan's Wake". En algún momento llaman a la puerta, Becket no lo oye y Joyce dice: "Come in". Al final de la jornada de trabajo, el secretario lee en voz alte el dictado del día. Al llegar al "come in", Joyce se sobresalta. "¿Y eso?". "Usted lo dijo". Tras un momento de reflexión, el autor decide: "Dejémoslo..."
- Richard Ellman, "James Joyce", Londres, 1959 -
5 comentarios:
Dictar una novela, me parece el colmo del éxito en la vida. Tumbarte en el sofá y charlar mientras otro lo copia. "no, quita eso. Borra. No, déjalo". El colmo del poder y la tortura.
Bien visto, Molinos. Pero es que encima no era una novela cualquiera, era "Finnegans Wake". ¡Finnegans Wake!
No me extraña que necesitara de secretario a un premio Nobel de literatura como Beckett.
Borges dictaba sus relatos (también por problemas de visión) y aquello debía de ser un espectáculo sin igual.
Los manicomios están llenos de secretarios así. Los copilocos los llaman creo...
Saludos.
¡Y tardó diecisiete años en escribirla!
Elvis, eran irlandeses. Están hechos de otra pasta. Imagínate la cena de empresa...
Sonia, tardaron 17 años y con razón. Aún me parece poco tiempo para el tipo de libro que es.
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