Invictus - 2009 - Director: Clint Eastwood
Reparto:
• Morgan Freeman (Nelson Mandela)
• Matt Damon (François Pienaar)
• Tony Kgoroge (Jason Tshabalala)
• Adjoa Andoh
Guión: Anthony Peckham (basado en el libro de John Carlin "Playing the enemy", en español: "El factor humano")
Fotografía: Tom Stern
Para empezar, Mandela o, mejor dicho, una descomunal interpretación de Morgan Freeman (que sólo puede paladearse en toda su dimensión en la versión original).
Desde la noche que sobre mí se cierne
negra como su insondable abismo,
agradezco a los dioses si existen
por mi alma inconquistable.
Nelson Mandela, el hombre llamado a liderar un país fracturado tras la pesadilla del apartheid. Cómo se puede pasar 30 años en una celda minúscula, salir y perdonar a los que te encerraron en ella, se pregunta François Pienaar (un hipermusculado Matt Damon), el capitán de los Springboks, la selección sudafricana de rugby.
Caído en las garras de las circunstancias
nadie me vio llorar ni estremecerme.
Bajo los golpes del destino
mi cabeza ensangrentada sigue erguida.
De repente, en 1995, el mundial de rugby, el deporte de la élite blanca, su mayor símbolo, odiado por la mayoría negra oprimida. Esta es la historia de una inspiración extraordinaria, de cómo un hombre supo entender la capacidad del deporte para unir a las personas.
Más allá de este lugar de lágrimas e ira
yacen los horrores de la sombra,
pero la amenaza de los años
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.
Dice "Madiba" al jefe de sus guardaespaldas, obligado a trabajar codo con codo con la antigua guardia presidencial: Tenemos que sorprenderles con compasión, templanza y generosidad.
Si no supiera que es un hecho real, si no hubiera visto en su día las imágenes por televisión, creería que Clint Eastwood nos estaba vacilando a todos. Pero no. Es una maravillosa historia maravillosamente contada.
No es una película sobre la victoria, es una película sobre no dejarse derrotar (ni por los demás, ni por nuestros propios prejuicios).
No importa cuán estrecho sea el camino,
cuán cargada de castigo la sentencia.
Soy el amo de mi destino;
soy el capitán de mi alma.
.
7 comentarios:
Me encanta tu cineclub!!!
Yo vi Invictus en el cine y me encantó; es todo un peliculón donde tanto Morgan Freeman como Matt Damon, actuan espectacular.
Pelicula que te hace hacer un repaso de tus valores personales y te infla de ánimo para luchar por lo que quieres. Me encantó
Besis
Yo también la vi en el cine el mismo finde que se estrenó, y la verdad es que el gran Eastwood lo bordó, incluso con las escenas del rugby. De hecho me gustó tanto que me la compre junto con Gran Torino y Million D. Baby.
Pero lo que realmente me gusta de la película es el mesaje,que si tu quieres puedes conseguir cualquier cosa por imposible que parezca, como demuestra el Gran Mandela. Además de la sublime interpretación del señor Freeman.
No, una época muy interesante y unos valores de reconciliación y consenso que tanto se echan en falta hoy en día. Gran película.
Vincent Vega, las escenas de rugby eran todo un desafío (tal vez se le vaya la mano en algún momento) pero las resuelve muy bien.
La "inspiración" a la que se refiere Mandela nos llega también a los espectadores. Un gran mensaje.
Yo la ví en el cine y le recomendé a mi hija que la viera. Y no sólo porque también le gusta el rugby. Al final reconoció que no había podido evitar llorar de pensar por lo que tuvo que pasar Mandela y lo grande que es alguien que sabe perdonar.
Deberían ponerla en las escuelas.
:)
Guardián del Faro, secundo la moción. Deberían ponerla en las escuelas, por eso en la Academia de Chimpancés nos hemos apresurado, dando ejemplo.
Yo recuerdo esa imagen de Mandela con la camiseta y la gorra, las crónicas de aquellos días... vivir los hechos en directo también fue fascinante (y la película lo recrea muy bien).
Desde luego que es una historia preciosa, de las que enseñan ese tipo de valores de los que ya no se enseñan en ningún lado...
Pero creo que como película podría estar mejor, se queda corta a mi entender y me dejó un sabor un tanto agridulce...
Saludos.
Elvis, la he visto dos veces. La primera me pareció perfecta (fue un ejercicio de nostalgia y disfrute de la historia).
La segunda vez, no lo negaré, he visto sus defectos. Alguna escena fuera de lugar, algún pasaje demasiado masticado, la duración excesiva del partido final... Soy consciente de que tiene defectos (y no seré yo quien los niegue), pero al final he preferido hacer caso a mi "yo entregado" del primer día.
Es verdad que la figura de Mandela podría dar para mucho más. Pero a veces es buena idea centrarse en momentos, en instantes, en anécdotas, para poder entender a un personaje en pocos minutos (aunque se quede corto, aunque sepa a poco).
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