Ya sé que os va a sonar raro, pero os toca a vosotros tomar la batuta y dirigir la clase de hoy. Por favor, interpretad la metáfora con el hemisferio más limpio de vuestro cerebro (si tenéis de eso).
Bien, quiero que hablemos de Tuenti (o como le llamamos en mi clase de yoga: "el tuenti").
Resulta que como soy joven pero no mucho, un mono de 35 tacos, ignoro cómo funciona esa red social vuestra de muchachos y muchachas sin apego a la vida. Pero en vista de que tengo bastantes visitas que llegan al blog directamente desde el tuenti me ha entrado mucha curiosidad.
¿Cómo es eso del tuenti? ¿es como dicen?
¿Debería tener un perfil de la Academia de Chimapncés en Tuenti o sería una pérdida de tiempo? ¿alguna vez nos ha preocupado excesivamente perder el tiempo?.
Porque (ahora me dirijo a los de mi quinta, pulpos en el mismo garaje) al tuenti sólo puede entrar uno si tiene invitación. Es una especie de filtro para que no entren gilipollas como yo. Pero oye, ahora han conseguido intrigarme.
Decidme, por favor, vosotros que habéis estado al otro lado de la web de inicio. ¿Qué hay por allí?. ¿Es verdad que os reenviáis emails con droga?.
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13 comentarios:
Y sobre todo si averiguas como coño funciona el tuenti ese envíame un mail o algo... Mi hijo me invito, abrí cuenta y allí estoy muerto de asco.
Hemithecomix, si me entero de algo te cuento. De momento sigo esperando frente a una puerta cerrada, como aquella alegoría kafkiana.
mmm ¿conoces el facebook? Pues es exactamente lo mismo pero es español...
Tito666, exactamente igual no puede es, porque aquí hace falta invitación. Lo cual tiene su gracia, para que todo el mundo que esté dentro tenga ya al menos un contacto y pueda interactuar. Y tiene sus pegas, claro.
Me parece que yo seguiré fuera para siempre.
HombreRevenido:
Prueba a publicar un anuncio pidiendo que te vendan una "invi". Empieza por ofrecer poco, y si ves que no la consigues, ya vas subiendo la oferta.
Mira que te lo digo porque al revés no vas a poder. Si ofreciste una cantidad al principio, no la puedes bajar luego alegremente.
Es la ley que tienen los mercados que nos gobiernan: la de la oferta y la demanda.
Sr. Skywalker, anonadado me encuentro. ¿Me quieres decir que realmente se subastan las invitaciones del tuenti?. No acabo de comprender. Entonces, ¿cada miembro de tuenti no puede invitar a todo el mundo que quiera?. Porque la única razón del mercado sería la escasez ¿no?.
Si Groucho Marx decía aquello de "nunca aceptaría pertenercer a un club que me aceptara entre sus socios", mi opinión es diferente en el caso de tuenti. Mi más profundo respeto hacia una red social que ha conseguido dejarme fuera.
Ahora bien, es la última vez que les hacemos publicidad. A partir de ahora nos referiremos a ella con el eufemismo "la mierda esa". Una mezcla sincera entre resquemor y admiración.
Te he enviado una invitación a tu correo, ya me contarás que te parece.... no la vendas ;)
Ey, Titoh666, muchas gracias. Sacaré un rato al mediodía para entrar.
Si aquí en la Academia podemos compensarte de alguna forma, con algún regalo, hablando de algún tema o con dinero (flaso), estamos tan emocionados que es el momento de pedirlo.
Tuenti???? y para qué quieres entrar ahí? si eso debe estar plagado de jessis, vanesss, josuasss y similares posando en los cuartos de baño delante de los espejos con poca ropa y poniendo morritos...
Aliena, si recibimos visitas desde Tuenti significa que tan mal no debe de estar la cosa.
Se trata, principalmente, de un brote agudo de curiosidad.
Ohh ciertamente algo inquietante sí es. Yo no recibo visitantes tuentieros...jo...
Que la disfrutes profe... supuse que, siendo mono, tendrías enormes sufrimientos por la curiosidad no satisfecha. De regalo me valen los buenos momentos que paso leyendo este blog y los comentarios de sus visitantes... aunque no participe de él tanto como quisiera.
Aliena, bueno, en cuanto me apunte yo a tuenti ya contaré como uno de ellos.
Titoh666, gracias de nuevo. Todavía no he tenido un momento para entrar, pero de hoy no pasa.
La Academia de chimpancés puede prometer y promete que seguirá al pie del cañón, pero sólo por pagarte la buena acción que has hecho. Tal vez dentro de 25 años te arrepientes, pero ya será tarde.
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