De los nervios ando.
Suena el despertador a las 7 de la mañana. Interrumpe un sueño prometedor. Pienso en que cualquier cosa es más prometedora que las obligaciones que me esperan. Me desanimo visitando los periódicos, por lo visto democracia viene de "versión demo". Me
expando animo
viendo un vídeo de Kylie en
Peibolslandia. Reordeno mi mundo como en un cubo de
Rubik y me doy cuenta de que algo falla. ¿Dónde coño aparqué ayer el coche?. Cafeína por favor. Pienso en que la película del Cineclub debería ser cada 15 días. Pienso en una sección nueva. Son 2 minutos de blog en largas horas de
¡glub!. Cafeína, sí, gracias. Trabajo como un sonámbulo trapecista. Me imagino entre tus piernas. Me imagino en un púlpito (qué bien elegido el diminutivo). Me imagino en el momento de satisfacción final, el del éxito a cambio del esfuerzo, a este paso euforia post-mortem. Frío descorazonador en la cara. Corazón descongelador en el pecho. ¿Adicto a la cafeína? ¿quién? ¿yooo?. Si me organizo bien, a las migajas del día les saco un par de horas de trabajo. Así que a cenar deprisa y a escribir despacio, que se atragantan las comas, aunque no te las comas. El flash de magnesio de la sonrisa (¡por fin!). La cama amable y una duda. ¿El despertador? A las 7, así me da tiempo de todo (o de nada).
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15 comentarios:
Tu fast day me da un pedazo de stress mortal,monito mío!
Tu le das a la cafeína,dices?mejor pónte en contacto con el nutricionista del Sevilla,que se ve que prepara unas papillas del carajo...terminarías siendo como el conejito de las alkalinas.¿Conviene?no lo creo.Pero tú verás.De todos modos,un abrazo.
Esta claro, a los días les falta la opción bonus track
Poder disponer de una pista extra a final del día de un par de horitas. Pero oculta, ¿eh? no vaya a ser que los jefes del mundo se enteren y nos amplien la jornada laboral...
Orleans, el día de ayer fue una mierda. Y el de hoy lo será también, con la enorme diferencia de que es jueves. ¡Jueves!
Ese abrazo me viene bien. Ole.
Serjuzu, tiempo, ¡tiempo! ¡TIEMPO!. Qué importante sería ese bonus track.
El problema de mi jefe es que sabe cada cosa que hago y ni por esas me libraría.
Concéntrateeeeee, respira profúuuuundamente, concéntrateeeeee,...
Estás entrando en el maravilloso mundo donde la actividad cerebral es de una intensidad tal que te proporcionará ideas brillantes.
Y si no es así al menos te sentirás relajado.
Un abrazo mañanero monillo.
Lo mejor de que hoy es jueves: que mañana será viernes.
Y a dormir sin despertador,
a soñar lo que haga falta,
y nada de cafeína
¡chocolate con churros!
Eso te pasa por tener el jefe ese que tienes, que vale, estará bueno, pero es un pelín capullo.
Si te hiciera trabajar menos tendrías más tiempo para todo.
Para tocarte, para tocar, para bloggear y hasta para aprenderte el baile de Kylie (sabía que te gustaría)
Qué bueno el texto de hoy.
Si, tienes razón, no se puede hacer de todo, por eso nos vamos conformando con hacer muchas cosas pero a medias y mal.
Parafraseando a Homer: viva la cafeina, a la vez causa y solución de todos nuestros problemas.
Ánimo, que ya falta menos para el viernes... A mi hoy es lo único que me consuela!
Yo también me declaro adicta al café (hasta límites insospechados) pero hay vicios peores como la adicción al trabajo. Ese sí que es malo!
De todas formas, cuando tienes muchas cosas llegas a todo, lo peor son esos días tontos que te sobra el tiempo y lo pierdes a diestro y siniestro.
Maru, no te creas, mi actividad cerebral suele ser siempre limitada. Relajado me quedo con ese abrazo.
Anay, creo que será el domingo cuando no haya despertador. Pero la perspectiva me alivia. Prefiero el chocolate a la Coca-Cola, ¡por supuesto!
Ese jefe es problemático, Peibols, me di cuenta cuando entró conmigo al baño.
Me alegrasteis la mañana (Kylie & you)
Me conformaría con hacerlo sólo a medias, Chic. La cafeína con burbujas es, algunos días, mi único consuelo.
Gata Lola, yo juraré una vez más que no soy adicto al trabajo, aunque lo parezca. Yo trabajo por el bien de la humanidad, y claro, eso me lleva mucho rato. A mí me gustaría vacacionar profesionalmente.
Tremenda descripcion de un dia...ojala no todos sean asi.
Y el cafe...que seria de nuestras vidas sin el cafe ?
La verdad es que es bastante estresante, sobre todo cuando sales de trabajar y ves que ya no te queda tiempo más que para cenar y a la cama y vuelta a empezar, bufff...Si te sirve de consuelo me solidarizo contigo
Y lo de la cafeína...entre semana cafés y el finde cubatas con cocacola, asi que tenemos "sangre en cafeína"
Yo llevo una semana de aupa... pero lo bueno viene al final... me voy de vacaciones ... a donde... al rio de la plata a buscar la esencia de Cortazar, Piazola, tomar mate e igual masticar hojas de coca, a que me llamen "gallego", a bailar tango...
Que ganas... Pero te seguiré en la distancia revenidoman...
Alberto, mi objetivo vital es conseguir tener sólo muy de vez en cuando días así.
El café nos mantiene abiertos los ojos y el espíritu.
Engarde, allí estamos, solidarizados en el pringue perpetuo. Y en las adicciones comunes.
Abu, campeón, como me alegro que cruces el charco (envidietas a parte). Disfruta mucho. Y tranqui, el blog y el archivo seguirán cuando regreses.
La cafeína es maravillosa y neuroprotectora, asi que ese trabajo que crees que tu que te está matando, está ayudando a mantener tu cerebro sano. Añade a tus días atropellados loas al señor por tu buenaventura...
Magog, me quitas un peso de encima. Ya notaba yo el cerebro más lozano. Tanto que se fue ayer y todavía no ha vuelto. Qué sabia es la naturaleza.
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