GENOCIDIO:
Sustantivo adjetivoso que, independientemente de lo que signifique (que no importa demasiado), sirve para magnificar lo que haga falta.
Dígase con voz hosca y dejando que la
G suene como un rugido, con el latigazo de furia de la buena conciencia (propia).
Puede hablarse así de la guerra GENOCIDA de Irak. O bien, el examen estaba puesto a pillar, fue un GENOCIDIO, suspendimos todos.
No sería inapropiado decir: su nuevo peinado es un GENOCIDIO; el coctail de gambas fue un auténtico GENOCIDIO; no haces más que discutir como un GENOCIDA.
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8 comentarios:
Es tal la magnitud del vocablo que dan unas ganas tremendas de relacionarlo con algo brutalmente agradable.No sé,este polvo ha sido un verdadero Genocidio.Si es de buena cata,casi te borra del mapa.Lo utilizaré para esos memorables instantes.¿Puedo?
Horrible palabra, interesante foto Hombre Re
Me apunto a tu iniciativa Orleans.
Esta mousse de chocolate está de genocidio...
El chocolate puede "matar" de placer y ya se sabe, a falta de polvo genocida...
Morbosillas las dos ¿eh? Utilizarlo para algo agradable sí que es algo nuevo.
La "pequeña muerte" del orgasmo, Orleans sería un simple homicidio. Ahora bien, realmente el orgasmo múltiple sí que podría tener otra consideración.
Gata Lola, el chocolate no es mal sucedáneo, como la diplomacia lo es de los conflictos.
podriamos hacer una gran guia de lo gramaticamente correcto ....
Para empezar decir a todos los locutores de la television que subir arriba o bajar abajo es una redundancia y una animalada
Ja, ja, ja! No lo sabes tú bien!
De todas formas, donde esté un original que se quiten los sucedáneos.
La diplomacia es lo mio. Y si no, al loro con el rey de bastos!
Lo de los locutores de radio y televisión no tiene nombre... pero es que no se puede tener todo en la vida. O das bien en cámara, o hablas como dios manda!
Y no sólo los locutores, hasta en la pornografía a veces se utiliza mal la lengua, Alberto.
Gata Lola, lo mejor es mezclar original y sucedáneo, sexo y chocolate, diplomacia y conflicto, o quizás chocolate y diplomacia, o también sexo y conflicto.
Sexo y chocolate bien, pero está ya muy visto.
Diplomacia y conflicto...no habría una sin el otro y viceversa. Pero no es mi rollo.
El chocolate con diplomacia se lo dejo a la Presley y a Ferrero Roche.
Me quedo con Sexo y conflicto. Siempre da como resultado relaciones turbulentas, morbosas y apasionadas.
Qué vicio tienes, criatura.
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