A semejante acontecimiento le han seguido momentos de depresión post-coitum-musical, abulia, cansancio, dolor de espalda y lo que viene siendo holgura craneal, que diría la convaleciente Molinos (que dio su apéndice por nosotros para el perdón de los pecados).
Otra cosa que me ha dejado grogui ha sido lo del vídeo que puse el viernes. Llamadme sensible.
¿Os he dicho ya que estuve en Pirineos Sur? Ah sí, os lo he dicho antes. Umm, ¿vosotros quiénes sois?
Se nos escapa el verano sin darnos cuenta (el narrador se pone melodramático, es el momento de que alguien le interrumpa y le diga que vuelva a la cama, es capaz de ponerse a contar lo del primer verano del blog). Y cada verano me acuerdo de los primeros pasos de esta tierna Academia (demasiado tarde, ¡¡huid!!), cuando éramos inocentes y donde ahora hay una mata de pelo sexy teníamos pelusilla.
Ese julio también estuve en Pirineos Sur (Hechizo). Acaso la vida entre en este tipo de bucles. Y me pregunto si no estaré repitiendo todo de nuevo, 7 años después. Sería aterrador y divertido. Repetir el blog post a post, siguiendo los mismos temas y dando mi visión actual. A lo mejor me sorprendo siendo peor de lo que era, siendo un descreído y un idiota cocinado por los 7 años (7 minutos en la edad de los monos) de madurez impostada.
Me gustaría descubrir las cosas de nuevo. A quién no. Por mucho que se sufra.
Me gustaría, dentro de 7 años, poder recordar las razones por las que no escribí en estos dos días. Decía Maeterlink que "más interesante que lo que la gente dice es su pensamiento secreto, y esto es lo que importa conocer".
Y este es un buen momento para dejar el post y hacer una despedida con pasos de charleston y besos al aire.
Mañana nos reiremos con carcajadas fuertes de miércoles. Alguno a lo mejor hasta se coge vacaciones y todo. Hijos de puta. Vosotros siempre más de todo ¿no?